Burger Like: primera cafetería que en Santiago de Cuba acepta pagos en criptomonedas

A Osmar Segura Sánchez sus amigos y familiares le llamaron loco pues abrió una nueva cafetería en Santiago de Cuba el pasado mes de abril, en medio del azote de la Covid a ese territorio oriental, y además aceptaba pagos en criptomonedas.

Casi seis meses después de inaugurada Burger Like no sólo no desapareció la cafetería, a pesar de enfrentar las medidas de aislamiento social que tanto afectaron a los empredimientos privados, sino que además alrededor del 30 por ciento de sus ingresos han llegado a través de pagos en criptomonedas.

“Desde que abrí la cafetería decidí aceptar el pago en cualquier tipo criptomonedas pues no quería desechar esa forma de pago y así tener un amplio espectro, no limitarme sólo con CUC y CUP. Cuando le creé a la cafetería su e-wallet, posteé en la página en Facebook esta posibilidad de pago y se comunicaron conmigo personas de otras provincias que querían que le hiciera llegar a sus familiares en Santiago de Cuba, a través de un servicio a domicilio que tiene la propia cafetería, algunas ofertas, y el pago iba a ser en bitcoin, lo cual fue una sorpresa ver la confianza que le tenían algunos a un negocio que empezaba y también en pagar en este tipo de moneda”, asegura.

Aunque los pagos suelen llegar en bitcoin, al ser la moneda más popular entre los cubanos que utilizan criptomoneda, también le han llegado transferencias en Ethereum, Litcoin y otras.

“Generalmente son los jóvenes quienes más me pagan en criptomonedas, si es por whatsapp el pago, le envío el código, si es un cliente que llega hasta nuestro local sólo escanea un código QR y listo”, añade.

Dado el éxito que ha tenido con el pago en criptomonedas, este joven emprendedor de Santiago de Cuba tiene previsto realizar ofertas destinadas al público que emplea este tipo de pago.

“Recibir pagos en criptomonedas tiene varias ventajas, una de ellas es que igual que el nombre de la cafetería, Burger Like, los bitcoins, por ejemplo, quienes más lo usan son los jóvenes, entonces me enfoco en ese tipo de cliente, y segundo es que los puedo convertir a partir de trasferencias, en MLC, con lo que pago una buena parte de las materias primas. Pero lo bueno es que adquiero el MLC de forma independiente al cambio que circula hoy en la calle que está subiendo escalonadamente, entonces me quito ese dolor de cabeza de arriba pues sólo me limitaría la disponibilidad del queso y el jamón, por ejemplo, y no depende del cambio en la calle”, añade.

Osmar, con Burger Like, es de los negocios privados que han decidido apoyar a los protectores de animales que en Santiago de Cuba se agrupan en SALBA (Santiagueros por el bienestar animal), en este caso el 13 por ciento de cada añadido de queso va a parar a dicha organización: “queremos expandir esta iniciativa a otros agregados y no sólo al queso, para contribuir a la compra de alimentos y medicinas. Serán iniciativas que en el futuro valoraremos”.

“Tenemos la idea de colocar en la cafetería un tarro, un pomo, donde las personas puedan donar dinero que será destinado a los fondos de SALBA”, acota Osmar.