En Santiago de Cuba en la calle Enramada existía una tienda muy conocida llamada “El Palo Gordo”, almacenes importadores de sedería y quincalla, precisamente tenía mucha relación con “La Casa Grande” de Lino Alonso en Sagua, ya que Benito Alonso Castro, uno de los gerentes del Palo Gordo era hermano y fue quien trajo a Cuba a Lino, además fue uno de los socios capitalistas que invirtió en la creación de la tienda de Sagua.
Esta casa comercial tiene sus orígenes en Santiago de Cuba en la calle Santo Tomás y San Jerónimo desde 1880 y la voz popular le comenzó a llamar así, porque en la misma esquina de la acera, existía un farol del alumbrado público, con un poste sumamente grueso el cual dificultaba el paso de los peatones. El nombre de su fundador se pierde en los años. Así es el origen y el nombre de uno de los antiguos establecimientos creados al calor de las actividades comerciales, febriles y entusiastas de aquellos laboriosos y sacrificados españoles que vinieron a Cuba con el buen deseo de crearse una posición económica y aportar dotando al país de nuevas fuentes de riquezas comerciales.

Uno de los dueños sucesivos traspasó el negocio en 1918 a Crisanto Alonso, dueño único que fue del establecimiento hasta que en 1920 hizo una Sociedad en Comandita con los gerentes Benito Alonso Castro, Higinio González Prado y el Dr. Francisco Dellundé Mustelier. En 1943 El Palo Gordo continuaba realizando las mismas actividades para las que había sido creado, importando directamente sedería y quincallería habiendo ampliado el volumen de los negocios, considerándose como uno de los primeros importadores en su ramo en el interior de la república.
Benito Alonso Castro originario de Coruña, España llegó a Cuba en 1903 estableciéndose y fundando un hogar cubano, Enrique Pérez Monteagudo es el apoderado general desde 1921 también de nacionalidad española al igual a Higinio González. Aquel edificio antiguo “Palo Gordo” es En nuestros días la legendaria y archiconocida por los Santiagueros Pizzería El Fontana di Trevi.